sábado, 3 de septiembre de 2011

agresiones

Mi peque siempre ha querido a Nora, la primera vez que la vio en casa, sin nadie pedírselo se acerco y le dio uno de "sus besos" ( esa imagen esta grabada en mi memoria). Pero como bien se dice: "del amor al odio solo hay un paso".
No es que odie a su hermana ni mucho menos, pero lleva tiempo pegándola. Comenzo cuando Nora empezó a gatear, si nos descuidábamos se sentaba encima de ella, y el se divertía un montón claro, pero ella... De ahí paso a sentarse encima y luego tirarse hacia atrás con ella cogida del cuello, en plan llave de judo, o de ponerse a su lado en el suelo y patearla con los pies ( pela solo tiene tres años, pero tiene un fuerza en las piernas impresionante, y de ello doy yo buena fe, que me he llevado muchas de esas patadas). El siempre se ríe y le divierte mucho todas estas situaciones, creo q lo hace como un juego con su hermana, donde ella llora y el se ríe. La mayoría de las veces por su expresión antes de hacerlo o su manera de correr conseguimos anticiparnos y que el daño sea el mínimo posible, pero muchas veces no estamos lo suficientemente cerca como para evitar el principio del "juego-agresión". También nos estamos dando cuenta que lo hace cuando esta muy contento y, quizás excitado. En el parque cuando le da por correr riendose, a la que nos descuidamos y pasa a su lado, zas... Ahora esta cambiando su técnica de agresión, pasando del empujón ( fuerte empujón, mas bien, con caída al suelo, y se te despistas todo lo demás...) al tirón de pelos ( fuerte tirón de pelos con arrastramiento).
El problema es q esta extrapolando esta conducta a otros niños desde hace tres días. Nosotros somos de los que salimos a diario al parque, por la mañana y por la tarde ( Si, como dice mi madre: Hija la casa no se te cae encima). El esta acostumbrado a otros niños, en el cole infantil y en el parque, y nunca había pegado a ninguno, ni empujado ni nada de nada. Pero hace tres días amago de pegar a uno ( después de haberlo hecho con Nora un par de veces). Y hoy lo ha intentado primero con un niño que se ha salvado por "los pelos" ( nunca mejor dicho) y luego lo ha  hecho con un bebe como Nora que estaba sentadito en el suelo tranquilamente, se ha acercado por detrás, y le ha enganchado del pelo ( y no veáis lo que me ha costado soltarlo) y todo esto después de pegar a Nora, evidentemente.
Quizás ,sin querer, hemos reforzado negativamente esa conducta. La cuestión es q tenemos que ponernos las pilas para intentar que no lo haga, sino creo q tendremos un serio problema.

2 comentarios:

  1. Como ya te dije anticpación! Se que es complicado, a mi también me pasa, y todavía no he conseguido que deje esa conducta, es como si no pudieran controlarse cuando se ponen tan nerviosos o contentos, pero cuantas más conductas consigamos evitar mejor...
    Besitos

    ResponderEliminar
  2. Hola Bea,mandame tu correo electronico y te envio copia de la entrada si quieres para publicar sobre la campaña contra los mitos del autismo.Un beso¡

    ResponderEliminar